Michigan se convertirá en el segundo estado que llevará a cabo un recuento de la votación de la elección presidencial de 2016.
El juez de distrito Mark Goldsmith emitió una orden a primeras horas del lunes a las autoridades electorales de Michigan para iniciar el recuento a partir del mediodía.
El fiscal general de Michigan, Bill Schuette, republicano, presentó una demanda la semana pasada para detener el recuento.
«Es inexcusable que Stein ponga a los votantes de Michigan en riesgo de pagar millones y potencialmente perder su voz en el colegio electoral en el proceso», dijo Schuette en un comunicado.
Stein ha encabezado un esfuerzo de recuento de votos en Michigan, Pensilvania y Wisconsin, tres estados decisivos donde Donald Trump derrotó por estrecho margen a Hillary Clinton.
Los partidarios de Trump en Wisconsin han intentado, sin éxito, detener el recuento en curso allí.
Stein ha recaudado casi 7 millones de dólares para financiar los esfuerzos de recuento, tras la noticia de que expertos en seguridad alertaron a la campaña de Clinton ante la posibilidad de hackeos en distritos clave en esos estados.