Trump busca refuerzos latinos

El candidato republicano a la Presidencia, Donald Trump, se reunió ayer  en Nueva York con el recien formado grupo de políticos y lideres religiosos hispanos que asesorarán su campaña electoral.

El grupo, nombrado Consejo Asesor Nacional Hispano para Trump (National Hispanic Advisory Council For Trump), aconsejará al candidato en su campaña electoral y dará a conocer “las propuestas de Trump a la comunidad hispana”, precisó el Comité Nacional Republicano (RNC, por sus siglas en inglés).

El candidato republicano se sentó con funcionarios electos, líderes empresariales y religiosos hispanos, junto con su nuevo equipo de campaña, en una reunión cerrada a la prensa.

Entre los miembros del grupo asesor está el senador estatal Ralph Alvarado, de Kentucky (primer hispano en ser elegido al Senado estatal); la representante estatal Clarice Navarro, de Colorado y los pastores Mario Bramnick y Alberto Delgado, de Florida.

El encuentro parece un intento de Trump para atraer el voto hispano después de que muchos miembros de la comunidad latina lo criticaran con dureza por decir que entre los migrantes mexicanos hay violadores y delincuentes que llevan drogas a su país.

El presidente del RNC, Reince Priebus, dijo en un comunicado que la participación de los miembros del grupo “es sólo un componente más de nuestros esfuerzos expansivos para relacionarnos con la comunidad hispana”.

Por otro lado, los simpatizantes de Trump desestiman los sondeos que revelan un declive en la campaña del republicano y culpan a los medios, encuestadores y alestablishment de perjudicar al empresario.

Desde finales de julio Trump aparece rezagado en los sondeos, según el portal de Real Clear Politics que hace un seguimiento de las encuestas. La demócrata Hillary Clinton tiene un promedio de seis puntos de ventaja, un enorme margen de aquí a las elecciones del 8 de noviembre.

Pero esos números no preocupan a los seguidores del millonario.

Aunque Trump encabezó cómodamente los sondeos durante las primarias republicanas, sus simpatizantes ahora creen que esas encuestas son manipuladas para aumentar las oportunidades de Clinton.

Pero el auténtico blanco del desprecio de los seguidores de Trump son los medios de comunicación.

Pese a que aceptan que su candidato ha cometido algunos deslices, sienten que los medios transforman estos incidentes en polémicas.