El Metropolitano Digital
Un posible endurecimiento en las políticas y seguridad migratoria en los Estados Unidos con el triunfo de Donald Trump, es una de las preocupaciones más latentes en los países de hispanoamérica y en El Salvador no es la excepción. Este miércoles, tras conocerse que el republicano Trump será el nuevo inquilino de la Casa Blanca, varios analistas visualizan como «preocupante» las decisiones que tomaría el nuevo gobierno con las personas indocumentadas que radican en ese país.
Basados en el discurso que Trump manejó durante la campaña política donde habló de construir muros fronterizos, de eliminar ciudadanía a los hijos de personas indocumentadas que nazcan en Estados Unidos y de deportaciones de personas con antecedentes delictivos hacia sus países de origen, los analistas y conocedores de temas migratorios como Reynaldo Alvergue, se preguntan si el país está preparado para recibir a los repatriados.
La deportación de personas hacia el país no es nuevo, lo inquietante en este punto según Alvergue, es la cantidad de personas repatriadas con antecedentes criminales que pudiera incrementarse con las nuevas políticas de Trump.
«Las deportaciones de personas con antecedentes criminales es peligroso. No sé si el país está preparado para recibir tantas deportaciones, el gobierno tendría que buscar un mecanismo para integrarlos a la sociedad», dijo Alvergue, durante la entrevista Frente a Frente de TCS.
Según estimaciones de Alvergue, la administración Obama deportó unas 500 mil personas. En El Salvador, dijo, ingresan semanalmente dos aviones con más de 300 salvadoreños repatriados desde los Estados Unidos.
Otros analistas como Óscar Santamaría y Jorge Villacorta sugieren investigar el contenido del plan de gobierno de Trump y no hacer valoraciones sobre su discurso. Además, sugieren seguir con detenimiento el rumbo de programas como el TPS y el TLC.