El fiscal propuesto por Trump promete no investigar a Clinton y ser un contrapeso al magnate

Jeff Sessions comparece ante el comité del Senado que debe aprobar su nombramiento.

     Agencias

El senador Jeff Sessions, nominado por Donald Trump para ser su fiscal general, se comprometió este martes a no investigar personalmente a la excandidata presidencial demócrata, Hillary Clinton, por el caso de sus correos electrónicos o por las polémicas donaciones a la Fundación Clinton.

«Este país no castiga a sus enemigos políticos, este país se asegura de que nadie está por encima de la ley», dijo Sessions ante el comité judicial del Senado, donde los legisladores evalúan su candidatura para convertirse en el titular de Justicia de Estados Unidos en el nuevo Gobierno de Trump.

Session también ha dicho que ha dicho que respetará la decisión de la Corte Suprema de aprobar los matrimonios homosexuales, que es contrario a prohibir la entrada al país a musulmanes y que servirá de contrapeso a los posibles excesos del polémico Trump. Sin embargo, sobre los musulmanes, aclaró: «Muchas personas tienen ideas religiosas que pueden ser peligrosas para la seguridad pública».

La sesión ha sido interrumpida en varias ocasiones por manifestantes que gritaron «¡no a Trump, no a un EE UU fascista, no al Ku Klux Klan (KKK)».

«No debe permitirse que una disputa política se convierta en una disputa penal», añadió el senador, de 70 años.

De esta forma, Sessions aseguró que se inhibiría de cualquier investigación sobre las polémicas donaciones a la Fundación Clinton o los correos electrónicos de la exsecretaria de Estado, a quien Trump prometió que perseguiría judicialmente y metería en la cárcel una vez que fuese elegido presidente de EE UU.

El senador aseguró que se apartaría de «cualquier cuestión» que implicara a Hillary Clinton porque una investigación podría «poner su objetividad en cuestión» debido a los numerosos comentarios que pronunció contra la ex primera dama durante la carrera a la Casa Blanca.