Por: Remberto Domínguez
La Secretaria de la Cultura de la Presidencia Silvia Elena Regalado, y el Director del Parque Zoológico Nacional, Vladlen Henríquez, brindaron una conferecia de prensa este lunes, donde informaron sobre el deceso del hipopótamo «Gustavito», quien fue enterrado de inmediato para no generar “morbo en la población salvadoreña”, según las palabras de Vladlen.
«Gustavito» murió la noche del domingo, después de haber sido agredido con objetos contundentes y cortopunzantes que le provocaron múltiples golpes y heridas, en todo su cuerpo.
Después de la agresión, el hipopótamo estuvo en constante supervisión por parte de veterinarios del parque, durante cuatro días, sin embargo debido a la gravedad de las heridas, falleció ayer por la noche.
«A partir de la muerte de «Gustavito» no vamos a traer otro hipopótamo más al parque. Vamos a continuar con el cambio en el enfoque del parque, el cual ya venía encaminado desde el 2009. Este será un centro de resguardo especialmente para especies nativas, locales o por lo menos de las regiones tropicales de américa», explicó el director Henríquez.
Además, Henríquez, aseguró que no llegarán especies de gran tamaño al Zoológico como: jirafa, hipopótamo, leones, chimpancés o gorilas.
Después de la muerte de «Gustavito» se realizó la necropsia correspondiente por dos veterinarios externos al Zoológico, entre las 3:30 y las 4:30 de la madrugada de este lunes, a solicitud de la Fiscalía General de la República (FGR).
La Secretaria Regalado, agregó que ante este hecho, se está trabajando en conjunto con la Policía Nacional Civil (PNC), para reforzar la seguridad en el Zoológico. El parque en la actualidad posee 10 cámaras de videovigilancia, pero donde habitaba «Gustavito» no había ninguna cámara, lo cual dificulta más la investigación.
El Parque Zoológico será abierto hasta nuevo aviso, para los visitantes nacionales y extranjeros; permanecerá cerrado mientras se realizan las investigaciones correspondientes.
«Gustavito», llegó procedente de un auto safari chapín, el 1 de octubre de 2004, y estuvo por 13 años en el zoológico nacional de nuestro país. La compra se realizó bajo la dirección de Mario Guevara, y del entonces presidente de CONCULTURA Federico Hernández.
