Lo de Paris no fue un aviso, no fue más que el reflejo de una realidad que rodea al Barcelona en los últimos meses y que ha sacudido al equipo azulgrana en repetidas ocasiones en lo que va de temporada. Se dijo que la remontada ante el PSG valía más que la conquista de una Champions (ver para creer), así que este Barcelona puede conseguir un triplete en caso de levantar la Copa de Europa al cielo de Cardiff en el mes de junio.
El problema del Barcelona radica en la total y absoluta dependencia hacia Messi, Neymar y Suárez. El azulgrana es un equipo construido por y para estos tres jugadores y el resto carece de fútbol y de ideas. Las que tienen les vale para competir por casa y no siempre, pero a la hora de pelear en Europa, las costuras saltan, con el entrenador a la cabeza y su empecinamiento en jugar con una defensa de tres, en la que los malos parecen peores y los buenos, malos. Curioso
El segundo correctivo al Barcelona llega tras clamorosos fallos individuales, relajaciones en la marca e incapacidad manifiesta a la hora de crear juego cuando la musa no pasa por la mente de Messi.
En el actual equipo azulgrana hay jugadores que ya han cubierto su etapa y lo han hecho a lo grande, pero llevan un tiempo que están de más en este equipo. Mascherano y Mathieu no tienen sitio en un once que debe ser competitivo al máximo y que con ellos en el momento del pitido inicial, deja de serlo. No pueden competir ante jugadores como Dybala, Cuadrado o los viejos conocidos Khedira o Higuaín. ¿Volverá Iniesta? No está
Ahora queda volver a tirar de épica y de historia, la misma que tiene la Juve y que no tenía el PSG. Del tema arbitral no hay que hablar, pero el mencionado Aytekin sigue sin arbitrar en las competiciones europeas y no lo volverá a hacer en la presente temporada y menos aún en el Camp Nou. Y lo digo porque el equipo francés se quejó a la UEFA de lo sucedido.
En una semana se verá si el Barcelona tiene que ir encargando una segunda Champions tras la ganada ante el PSG. La historia no pinta bien y Chiellini, Bonucci y Barzagli no se andan con tonterías por mucho que enfrente estén Messi, Neymar y Suárez.
Por: José Félix Díaz | Marca
