También «ha incrementado la polarización de una sociedad ya dividida», lamentó.
La portavoz insistió en que «no hay alternativa al respeto de las instituciones legítimas, a la separación de poderes y al derecho de los ciudadanos a expresar libremente su opinión política».
«El Gobierno de Venezuela tiene la responsabilidad de garantizar el respeto de la Constitución venezolana», enfatizó, y reiteró que la UE «llama a todos los actores en Venezuela a trabajar por instalar la confianza necesaria para una solución negociada de la crisis institucional».
Pidió además al presidente Nicolás Maduro que «libere urgentemente a todos los prisioneros políticos y garantice el respeto del Estado de Derecho y los derechos humanos».
La UE, destacó, «seguirá trabajando con todos los socios, nacionales e internacionales, para garantizar un apoyo adecuado a un retorno no violento al orden democrático y una solución a los apuros económicos y sociales» en los que se encuentra el pueblo venezolano.
Maduro defendió este domingo que la decisión de la Asamblea Constituyente de remover a la fiscal general era «necesaria», al tiempo que defendió la legalidad del órgano que reescribirá la Carta Magna venezolana.
Las protestas de la oposición a Maduro que comenzaron en abril pasado han causado la muerte de al menos 120 personas.