¡Cómo no te voy a querer!

Por Santiago Leiva

Al silbato final unos doblaron rodillas para agradecer al Creador por el título, y otros subieron sobre la baranda para fundirse en abrazos interminables con sus hinchas. La  tarde fue blanca para el Alianza que celebró la corona, dio un recital de goles y recibió un concierto de errores de su rival Santa Tecla.

Los elefantes atropellaron literalmente  a una Santa Tecla errática,  y sin alma que rezó más porque el tiempo terminara y evitar una paliza mayor que por esperanzarse por una remontada histórica.

El resultado final fue un 4-1 que confirma al Alianza no solo como el mejor equipo del torneo, sino que le regala su décimo segundo título y le pone en un sitial privilegiado en la historia del fútbol salvadoreño.

Los pupilos de Jorge “el Zarco” Rodríguez levantaron la doceava corona en condición de invictos. Los albos no perdieron ni un solo juego de los 27 que disputaron, imponiendo así un listón alto para los próximos aspirantes al título.

Los pericos que las dos finales anteriores se pavonearon sobre el verde césped del Cuscatlán esta vez salieron desplumados y les tocó comer “masa agria”.

Tempranito empezó el festejo para los capitalinos. Había fiesta en las gradas con centenares de hinchas vestidos de blanco desde antes de las 3:00, y once minutos después del pitazo inicial la felicidad de los paquidermos también se había trasladado a la grama.

Fue Marvin Monterrosa quien descorchó el festejo.  Al ´11, el volante blanco corrió para encontrarse con un balón y le pegó con el alma para vencer al portero Joel Almeida.

Todavía aturdidos por el primer gol la zaga perico se atuvo en un trazo largo de Alex Larín al ´15, y Fito Zelaya aprovechó el despiste de Juan Barahona y el “Pituca” Almeida para colocar éxtasis con el 2-0.

Habría más castigo para los tecleños en una primera media hora pletórica para los capitalinos y negra para sus vecinos. Al ´29 Bryan Tamacas intentó hacer un sombrerito sobre Gustavo Guerreño, y este lo pilló y puso el 3-0.

En adelante Alianza bajó revoluciones y el bicampeón herido de muerte y con el orgullo por los suelos se volcó por el descuento.

Llegó justo al ´44 con remate mordido de Ricardinho, pero solo valió para matizar el resultado, porque a la vuelta de las duchas Alianza no solo volvió a imponer condiciones sino que también consiguió el gol de la tranquilidad.

Fue Fito Zelaya quien volvió a aparecer para evitar el nerviosismo final. Ariete paquidermo recibió un balón servido al ´64 y definió con un globito al ver adelantado al meta perico.

Ahí concluyó la historia. Una historia triste para Santa Tecla que buscaba su tercer título al hilo, y una alegre para Alianza que tendrá su “blanca Navidad”.