Agencias
Leo Messi se ha referido al ansiado regreso de Neymar al Barcelona. En una extensa entrevista al diario Marca, el astro argentino admite que les gustaría volver a tener al brasileño de compañero, si bien no es algo que vaya a ser sencillo.
«Veo complicado que Neymar salga del PSG. Nos encantaría que volviera por lo que significa, como jugador y para el vestuario. Somos amigos, vivimos cosas lindas juntos y otras no tanto. Pero el PSG no va a dejar que le quiten a Neymar», confiesa Messi.
El capitán blaugrana tiene palabras de cariño hacia el díscolo Dembélé.
El francés está en el ojo del huracán por sus constantes faltas de disciplina, fundamentalmente por los problemas que tiene para ser puntual, pero para Messi es un jugador de gran proyección. «Depende de él donde quiera llegar. Puede ser de los mejores del mundo. Es joven y se está adaptando. Cuanto menos se hable de esto, mejor. Ya se ha dado cuenta de los errores. Es un chico muy bueno, ha rectificado y vamos a ayudarle entre todos», asegura, contundente.
No obstante, ha enviado un mensaje a Valverde y a la dirección deportiva. «Es importante volver a apostar por los chicos de la cantera, que vean que no es imposible escalar. Tenemos una gran cantera y en un futuro se podría dar lo de jugar con once jugadores de la casa, pero llevará su tiempo», pide Messi.
La rivalidad con Cristiano Ronaldo
Esta es la primera temporada en la que, salvo que se encuentren en la Champions, no se vivirá un duelo Messi-Cristiano. Para el argentino, la ausencia del portugués es algo que el Real Madrid ha notado mucho, como le pasaría a cualquier otro club. «El Madrid es un grandísimo club y tiene jugadores de sobra, pero a Cristiano se le echaría de menos en cualquier equipo.
Marca muchísimos goles y te da muchas cosas. No me sorprende que le extrañen», admite. Sobre la rivalidad deportiva que tuvieron, Messi considera que fue algo muy bueno para el espectáculo.
«La época en que estuvimos en la misma Liga e intentando ganar cada uno con su equipo fue muy linda. Era una rivalidad muy sana en la que los dos queríamos superarnos. Y fue bueno para el espectador», admite. También considera Messi que el Balón de Oro era un objetivo irreal esta temporada, no tanto por su actuación, sino por el buen hacer de los otros candidatos. «Sabía que esta temporada no tenía posibilidades de ganarlo. Escuchaba los nombres y sabía que no iba a estar ahí. A partir de ese momento no me puse a esperar si era tercero o cuarto. No me sorprendió, porque no me esperaba nada», admite.
