El Gobierno anunció la reanudación ordenada y segura del servicio del transporte público a partir del próximo 24 de agosto, bajo una estricta aplicación de protocolos sanitarios para proteger a los salvadoreños del COVID-19.
“Nos hemos reunido con la Mesa Nacional de Transporte, otros transportistas, incluso del centro y oriente del país”, para coordinar el proceso, informó el ministro de Obras Públicas, Romeo Rodríguez en conferencia de prensa.
Para el proceso se deberá cumplir un estricto protocolo creado junto al Ministerio de Salud y que está en manos de los empresarios, señaló el funcionario.
Rodríguez explicó que algunas de las medidas a implementar son el uso de alcohol gel, mascarillas, dos personas por butaca, desinfección al menos tres veces al día de las unidades”.
Se colocará además “cierta señalización en cada una de las paradas y las terminales para garantizar un distanciamiento social de al menos dos metros por cada pasajero que aborda la unidad del transporte colectivo”.
El viceministro de Transporte, Saúl Castelar, destacó que el protocolo incluye “una distribución de los pasajeros y de los viajes, para que se tengan en operación únicamente las unidades que sean necesarias”.
“De esta forma, garantizaremos la seguridad sanitaria de todos los usuarios”, añadió Castelar, quien señaló que este proceso se deberá cumplir al pie de la letra ante el peligro que aún representa la pandemia.
Sobre la compensación económica al transporte colectivo, el ministro Rodríguez explicó que “desde el inicio planteamos darlo solo si se cumplían condiciones de calidad hacia el usuario. Dentro de ellas está el buen estado de las unidades y las revisiones técnicas”, agregó.
“Ese dinero que se le da a las unidades que no están circulando, se puede usar para las escuelas» y para darle a la población lo que tanto necesita, dijo el ministro.
Advirtió, además, que las unidades que no circulen durante la reapertura económica, podrían ser objeto de sanciones, incluso hasta la suspensión de su línea.
