Por Paula BUSTAMANTE
La muerte del expresidente Sebastián Piñera al estrellarse el helicóptero que pilotaba en el sur de Chile conmocionó a un país en duelo por los megaincendios de Valparaíso, que ahora prepara funerales de Estado para el primer mandatario de derecha desde el retorno a la democracia en 1990.
La causa de muerte del expresidente Piñera «es asfixia por sumersión», dijo la fiscal regional de Los Ríos, Tatiana Esquivel, en la ciudad de Valdivia, 850 km al sur de Santiago.
En esa ciudad, el féretro estuvo acompañado por algunos de sus cuatro hijos, varios de los nueve nietos pequeños del exmandatario y su viuda, Cecilia Morel, observó un equipo de la AFP en el lugar.
El empresario era, a sus 74 años, uno de los hombres más millonarios de Chile, reconocido por haber logrado en 2010 llegar al poder como el primer político de derecha electo democráticamente después de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990).
El presidente que gobernó dos mandatos, 2010-2014 y 2018-2022, recibirá funerales de Estado hasta el viernes.
El cortejo fúnebre con los restos de Piñera partió de Valdivia entre aplausos por admiradores que se acercaron a ver el paso de la carroza.
Entre personas de todas las edades, Olga González, de 61 años, dejó su casa para darle un último adiós desde la calle: «Fue un gran presidente. Alguien que luchó por su país siempre, nunca tuvo un ‘no'», dijo a la AFP.
Sus seguidores, y también sus rivales políticos, han destacado su capacidad de diálogo y compromiso con una democracia liberal.
«Fue un demócrata desde la primera hora, y buscó genuinamente lo que él creía que era lo mejor para el país», destacó el presidente izquierdista Gabriel Boric, quien sucedió a Piñera en el poder en marzo de 2022.
Entre los éxitos de gestión que marcaron a la sociedad chilena resaltan la agilidad con que impulsó la reconstrucción del país tras el terremoto de 2010; el empeño en sacar con vida a los 33 mineros que quedaron atrapados durante 69 días ese mismo año, a 700 metros de profundidad, en el norte de Chile; y la rápida compra de vacunas a China en 2020, que hicieron de su país uno de los primeros en inmunizar a la mayoría de la población del covid 19.
– Pendiente de los incendios –
Piñera había viajado esta semana a su casa en Lago Ranco, un lugar rodeado de bosques junto al inmenso lago, situado a 920 km al sur de Santiago, donde gestionó reuniones con sus exministros para ayudar a la reconstrucción de Valparaíso, arrasada por incendios que han dejado 131 muertos.
Era «un hombre que no descansaba», apuntó su exministra Karla Rubilar al contar que el lunes pasado los convocó por Zoom desde Lago Ranco, «preocupado de cómo contribuir al gobierno del presidente Boric en la tremenda tragedia que estábamos viviendo» en Viña del Mar, centro del país y otras regiones del sur de Chile, dijo a medios locales.
El exmandatario apenas había despegado piloteando su helicóptero -una de sus mayores pasiones-, después de un almuerzo con amigos y con su hermana Magdalena Piñera. Viajaba con ella y dos amigos cuando se estrellaron en medio de una tarde de intensas lluvias y neblina.
Los otros tres pasajeros sobrevivieron prácticamente ilesos, mientras que Piñera quedó atrapado. El fuselaje quedó a 40 metros de profundidad, donde la Armada de Chile pudo recuperar su cuerpo, indicó la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC).
– «Consternados» de Biden a Maduro –
Gobiernos y líderes políticos de América Latina expresaron su pesar por la muerte del expresidente chileno, destacando el optimismo y la capacidad de diálogo, pese a las diferencias ideológicas que lo distanciaban de algunos mandatarios.
«¡Paz a su alma!», deseó el presidente venezolano, Nicolás Maduro, en X, al tiempo que aseguró que su país se une «al duelo que embarga al pueblo de Chile ante el lamentable fallecimiento» del expresidente.
A los mensajes de condolencias se sumaron los presidente de Argentina, Javier Milei, de Uruguay, Luis Lacalle Pou y el exmandatario José «Pepe» Mujica; de Bolivia, Luis Arce, la mandataria peruana, Dina Boluarte, y de España, el jefe de gobierno Pedro Sánchez.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dijo que valoró mucho el tiempo en que trabajó con Piñera en la última década: «Vi de primera mano su dedicación al país», recalcó.
El ministro de Relaciones Exteriores, Alberto Van Klaveren, detalló que el miércoles en la tarde y el jueves se abrirán las puertas del Congreso para que quienes deseen rendir homenaje al presidente puedan hacerlo. El viernes será trasladado a la Catedral Metropolitana para realizar una misa con presencia de «aquellos líderes o presidentes extranjeros que desean participar en el funeral», indicó.
Por ahora no se han confirmado los mandatarios extranjeros que viajarán a Chile a despedir a Piñera.
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