Washington, D.C. — La Casa Blanca informó este viernes que el mes de julio registró una caída sin precedentes en los cruces ilegales en la frontera sur de Estados Unidos. Según datos oficiales, solo 4,598 inmigrantes ilegales fueron arrestados por la Patrulla Fronteriza, una reducción del 24% respecto al récord anterior registrado en junio, y un promedio diario de apenas 148 cruces ilegales.
La administración Trump destacó que esta cifra mensual representa una disminución del 97% en comparación con julio de 2022, cuando se contabilizaron 181,834 cruces ilegales. También es un 96% menor al total de julio de 2023 (132,642) y un 92% menos que el de julio de este año (56,400). “Es algo inaudito en una frontera sur de casi 2.000 millas de longitud”, comentó el periodista especializado en temas fronterizos Bill Melugin, citado en el comunicado.
La caída en los cruces ilegales contrasta fuertemente con el promedio diario registrado durante la administración Biden, que, según el comunicado, alcanzaba los 5,110 cruces ilegales diarios. Funcionarios del gobierno aseguran que los resultados reflejan el impacto inmediato de las políticas migratorias impulsadas por el presidente Donald J. Trump desde su regreso al poder.
Además, la operación de deportación también muestra cifras en aumento. Desde que asumió el cargo, la administración Trump reporta cerca de 150,000 arrestos de inmigrantes ilegales, incluidos aproximadamente 50,000 en las últimas ocho semanas. Este volumen representa el doble de detenciones que en el mismo período del año anterior.
“Está haciendo lo que prometió. Está haciendo lo que la abrumadora mayoría de la gente quiere que haga: sacar de las calles a los delincuentes”, expresó Andrew Arthur, exjuez de inmigración, en apoyo a las recientes acciones ejecutivas del mandatario.
Las autoridades subrayan que estas cifras reflejan los avances en el cumplimiento de una de las principales promesas de campaña del presidente Trump: restaurar el orden en la frontera sur y reforzar la seguridad interior mediante la expulsión de inmigrantes ilegales con antecedentes criminales.
Hasta el momento, organizaciones defensoras de los derechos de los migrantes no han emitido comentarios oficiales sobre este nuevo reporte. Sin embargo, se prevé que las medidas continúen generando intensos debates políticos y legales en los próximos meses, especialmente de cara al proceso electoral.