El Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH) apareció por primera vez en el país hace 30 años (1984) y desde entonces un total de 31 mil 827 personas han sido diagnosticadas hasta ahora con la enfermedad. De ellos un 62.5% son hombre y un 37.5% mujeres, siendo la zona urbana la más afectada.
Aunque la población portadora con el virus es el 1% de la población total en el país, la enfermedad prevalece en grupos específicos como trabajadoras del sexo, hombres que tienen relaciones sexuales con hombres y mujeres transgénero; es mayor con respecto a los demás segmentos poblacionales por lo que recibió el nombre de epidemia concentrada, según el Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH/SIDA (ONUSIDA)
Según datos del Estudio VICITS (Vigilancia Centinela para Infecciones de Transmisión Sexual) para el año 2012 un 25.8% del total de personas de la comunidad de mujeres transgénero en el país habrían adquirido el virus, así como un total del 5.7% del total de personas trabajadoras del sexo y un 10.8% de hombres que tienen sexo con hombres.
Para el técnico de monitoreo y evaluación del Programa Nacional de ITS/VIH/SIDA, Salvador Sorto, la estigmatización ha llevado a que estos grupos poblacionales sean más vulnerables al VIH. “El estigma y la discriminación que la sociedad hace hacia estas personas permita que ellos no tengan acceso a los servicios de salud y acceso a otras oportunidades de atención” señala Sorto.
Reducción de los casos
Desde el año 2008 los casos de VIH en los sectores vulnerables han presentado una reducción sensible. Sorto aduce este baja a “un cambio de dirección” hacia la prevención del virus enfocada en las “poblaciones claves” que presentaban un mayor número de casos.
En el 2007 se registraban 6 casos por día, para el 2014 se tiene un registro de 4 casos de personas diagnosticas con el virus. En datos generales, se muestra una reducción considerable en números de nuevos casos de VIH.
En 2013 fueron 1,448 casos, y hasta el 31 de octubre de este año se han registrado 1,096 nuevos casos del virus.
También se han reducido considerablemente los casos de transmisión de forma vertical, es decir de madre a hijo. En el 2013 se registraron solamente 6 casos de este tipo de transmisión que es un número menor en comparación a los 142 casos registrados por año anteriormente.
Según la Organización Panamericana de la Salud (OPS), El Salvador va en camino de la eliminación de la transmisión materna infantil del VIH.
Las autoridades sanitarias han realizado diferentes campañas de prevención para orientar a las personas sobre el VIH. Se suman jornadas de concientización y reiterados llamados para hacerse la prueba
Según el Informe Nacional sobre el estado de Situación del VIH en El Salvador, en 2008 se invirtió un total $9.6 millones para la prevención del virus, cifra que se ha incrementado año con año hasta llegar a $14.8 millones en 2013 lo que ha permitido que haya una tendencia a la baja en casos nuevos de VIH.
Tratamiento para el VIH
Salvador Sorto asegura que la calidad de vida de una persona con VIH o “VIH Avanzado” es igual a la de una persona que padece una enfermedad crónica siempre y cuando la persona se “adhiera” al tratamiento de antirretrovirales.
La constancia en la toma del medicamento es determinante, señaló Sorto, además la persistencia en su control médico en clínicas para recibir todos los controles necesarios. “Tenemos 20 hospitales en el país que tienen clínica de atención integral” dice el especialista.
Los tratamientos para el VIH se dividen en 3 líneas: la primera de antirretrovirales tiene un costo aproximado de $180 y es para personas que son constantes en la ingesta de medicamentos. La segunda línea de medicamentos cuesta aproximadamente $1,800 y la tercera cuesta $20 mil. Esta se usa en casos donde el virus es resistente a los medicamentos.
Para determinar cuál es la línea de tratamiento a usar en una persona con VIH se hace una prueba de “Genotipaje” y esta arroja los fármacos a los que es resistente el paciente.
El Salvador adquirió un equipo para hacer este tipo de pruebas este año y su costo fue de $11 mil.
Los medicamentos antirretrovirales no erradican el VIH, sin embargo hacen que el virus no se “replique” de manera que no afecte a la persona y esta pueda llevar una vida normal, como cualquier otra.
Entre los métodos de prevención para el VIH se encuentra la abstinencia. Sorto recomendó a los jóvenes postergar en la medida de lo posible las relaciones sexuales, además señaló que la fidelidad es otro método preventivo.
Aseguró que un preservativo puede disminuir en gran medida los riesgos de contraer el virus. También recomendó hacerse la prueba del VIH de forma periódica para asegurar su salud o para acudir al tratamiento correspondiente.
