El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, anunció que viajará a la ciudad de Orlando, Florida, el próximo jueves, con el objetivo de reunirse con familiares y víctimas de la ataque registrado el domingo, en una discoteca gay de la ciudad, que ha dejado como saldo de 49 muertos y más de medio centenar de lesionados.
A través de un comunicado, la Casa Blanca informó la visita del presidente a Orlando, para «trasladar su pésame a las familias de las víctimas y solidarizarse con la comunidad cuando esta empieza su recuperación».
Tras el ataque registrado el pasado fin de semana en la discoteca gay de Orlando, Obama volvió a insistir en la necesidad de endurecer las leyes sobre las armas de fuego, por lo que este domingo advirtió al Congreso de que «no hacer nada» al respecto «es también una decisión».
El presunto autor de la masacre, el estadounidense de origen afgano Omar Mateen, había sido investigado por el FBI pero, al no contar con historial criminal, pudo comprar de manera legal las armas con las que llevó a cabo el tiroteo, el más letal en la historia reciente del país.
Mateen, quien nació en Nueva York hace 29 años y fue abatido ayer por disparos de la policía, juró lealtad al grupo terrorista Estado Islámico (EI) en sus conversaciones telefónicas con los negociadores policiales durante las tres horas que permaneció dentro del club nocturno con una treintena de rehenes, según informó hoy la Policía.
