Agencias
Desde su primera aparición pública, a los 19 años, cuando se comprometió con el príncipe Carlos, su figura cautivó a millones de personas que se hicieron sus fieles seguidores.
Lady Di se convirtió en una especie de estrella pop, y su estilo para vestir y peinarse fue imitado por muchas mujeres; además, sigue siendo admirada por la labor filantrópica que realizó, la cual heredó a sus hijos.
Después de su divorcio, en 1996, cayó en una terrible depresión. Quienes estuvieron cerca de ella aseguran que no se sentía amada por nadie, e intentó buscar de nuevo el amor; fue entonces cuando ríos de tinta corrieron involucrándola en una serie de romances y escándalos que pusieron en duda que el príncipe Carlos fuera el verdadero padre de Enrique.
Cuando finalmente parecía que se había reinventado y encontrado a un hombre que estaba dispuesto a amarla y devolverle la felicidad, un trágico accidente le quitó la vida.