Biscuit Factory, una tradición familiar de pan en miniatura y ahora de un buen café

Víctor Flores en la nueva sucursal de Biscuit Factory en la colonia San Benito | Fotos por Kevin Aguilera

Por Remberto Domínguez

Biscuit Factory es un negocio familiar que nació en 1999 bajo el concepto de una panadería en Ciudad Merliot, pero con el transcurrir de los años y la demanda de los clientes la oferta se amplió al servicio de bebidas frías, calientes, pizza, y un menú variado en gastronomía italiana.

Actualmente Biscuit Factory cuenta con dos sucursales: una en Antiguo Cuscatlán y la segunda en la colonia San Benito. El artífice de este novedoso concepto, donde los clientes pueden disfrutar de un buen café y un delicioso y pequeño pan dulce es Víctor Flores.

Bicampeón nacional de barismo, joven emprendedor y un salvadoreño visionario, Víctor trae consigo una herencia de panaderos y pasteleros que ha materializado en sus coffe shops.

Los abuelos de Víctor eran los dueños de los Cakes Carrusel, y ellos le propusieron al padre de Víctor que se encargara de la producción de tortas de cakes que luego serían vendidas a Cakes Carrusel para su decoración. Bajo esa dinámica se simplificó la operación, se ganó más espacio en la planta de producción y se dinamizó el negocio familiar.

«Mi mamá trabajaba en CEL, ella renunció, hubo un retiro voluntario, lo aprovechó  y con lo que le dieron de indemnización lo invirtió en la empresa. Así fue como nacimos: sin marca comercial, sin fachada comercial, ni nada por el estilo», recordó el joven emprendedor.

Los padres de Víctor tenían toda la maquinaria para hacer pan y aprovecharon el recurso para innovar de tortas de pan para cake a panadería. Se preguntaron ¿qué sería lo novedoso que les ofrecería a las personas en la oferta de panadería?

«No sé de donde se les ocurrió hacer pan en miniatura y fuimos la única empresa exclusiva en hacer miniaturas», dijo Víctor.

El pan que ofrece Biscuit Factory es enfocado a varios nichos de mercado como a las personas que están a dieta y solo quieren comer en cantidades mínimas, perfecto para empresariales, reuniones de amigos y a los niños que les atrae el tamaños de los panecillos.

Cuando Víctor se graduó de bachiller en el 2005, decidió estudiar Arte Culinario y poco a poco le permitieron introducir ideas nuevas al negocio. «En Antiguo Cuscatlán, abrimos la tienda en 2011 y bajo la idea de que el pan dulce y el café van de la mano, dijimos ok… vendamos café», señaló

Agregó: «Sí íbamos a vender café, queríamos hacerlo muy bien y como sabemos  El Salvador produce uno de los mejores café del mundo y nosotros queríamos ofrecer eso. Para ello nos comenzamos a entrenar en el mundo del café y conocimos a quienes ahora son nuestros entrenadores, consultores y proveedores en materia de café y ellos nos introdujeron al mundo del café de especialidad».

Víctor es un barista profesional, en 2013 participó en su primer campeonato de barista a nivel nacional y logró quedara en sexto lugar. Este año Víctor se agenció nuevamente con el primer lugar de barismo a nivel nacional, lo cual le permitió participar en el Campeonato Mundial de Barismo que se realizó en Corea Del Sur, el mes de noviembre, donde de 59 barista de todo el mundo quedó en la posición 26, siendo un buen logro para el país.

La nueva sucursal de Biscuit Factory San Benito, se abrió hace dos meses y tiene una capacidad para albergar a más de 70 personas, en una ambiente rejado, donde la persona no querrán irse del lugar. Además, se pueden realizar bodas, tés, showers, cumpleaños o reuniones de trabajo.

En Biscuit Factory el cliente puede disfrutar de la hora del café, del mundo del café, el mundo de los métodos, y una variedad de tés importados de todo el mundo, además hay una buena selección de cerveza nacional y extranjera y vinos. En el concepto gastronómico hay aperitivos; por ejemplo, carpaccio, Crostini, ensaladas, pizzas y la pandearía tradicional de la casa.

Biscuit Factory en la actualidad está generando más de 15 empleos directos y 25 empleos indirectos. Está abierto de lunes a miércoles de 8:30 am a 9:00 pm. Los jueves, viernes y sábado de 8:30 am a 10:30 pm y los domigos abren de 9:00 am a 6:00 pm.

Sin duda esta es una muestra de que sí se puede emprender en El Salvador y muestra de ello es Víctor Flores, un joven de 30 años quien ha dado muestra que «el querer es poder», y el mensaje que hace a los emprendedores es que nunca dejen de soñar y sí van a emprender un negocio que se documenten en lo que van hacer.