Inicia Caminata de los Pueblos Originarios en Resistencia

El Metropolitano Digital

Los pueblos originarios de occidente de El Salvador, en coordinación con la Secretaría de Cultura de la Presidencia, el Ministerio de Gobernación y Desarrollo Territorial y la Asamblea Legislativa, desarrollan la Caminata de los Pueblos Originarios en Resistencia, en conmemoración  de la Masacre de 1932, del 17 al 22 de enero 2018.

La ruta de la caminata inició en el parque central de Tacuba y continuará su recorrido por Ahuachapán, Ataco, Apaneca, Salcoatitán, Nahuizalco, para concluir en el parque Del Campanario de Izalco, ubicado en Sonsonate.

Participan pueblos y organizaciones como el Consejo Ciudadano de Pueblos Originarios de Tacuba, la Alcaldía del Común de Izalco, comunidades organizadas de Nahuizalco, Acajutla, Santa Catarina Masahuat, Caluco, la Mesa Artesanal de Ataco y cofradías locales, la Asamblea  Ciudadana Municipal de Ataco, el Consejo Consultivo Ciudadano de Ahuachapán y la Red de ARPAS.

Cada uno de los participantes apoya decididamente la lucha de los pueblos originarios por obtener un modelo social humano en el que vivan y se desarrollen sus habitantes, manteniendo la armonía con la naturaleza y una estrecha relación espiritual con el gran Formador y Creador, como cita el manifiesto.

Asimismo, el documento indica: “Por muchos años los pueblos originarios han experimentado migraciones; unas por la búsqueda de provisiones y conocimiento, otras por causas fortuitas y otras por las imposiciones de una nueva cultura que trajo consigo otro modelo social; truncándose así sus aspiraciones”.

El documento continúa: “A través del tiempo, han conseguido vivir y sobrevivir firmes con una indocilidad, sincretismo y tenacidad que les ha permitido mantener su propia cosmovisión a pesar de los detrimentos.”

Es por eso que en esta ocasión los pueblos originarios han tomado la decisión de manifestarse mediante la  Caminata de los Pueblos Originarios en Resistencia, pues con ella no solo se conmemora la Masacre de 1932, el mayor etnocidio de la historia contemporánea de El Salvador, sino que también contrarrestan la invisibilización a la que por años han sido sometidos.

Según lo que establece el “Primer manifiesto de pueblos originarios de occidente de El Salvador”, por años la población indígena ha contribuido a la humanidad en diversos aspectos: La agricultura (con la creación y distribución de la semilla del maíz), medicina (con el conocimiento de las propiedades curativas de las plantas y árboles originarios) y alimentación (saludable y armoniosa), entre otros.