El ministro de Situaciones de Emergencia de Rusia, Vladimir Puchkov, informó este lunes (26.03.2018) que la cifra oficial de fallecidos por el incendio declarado en un centro comercial de Siberia asciende a 64 personas, entre ellos numerosos niños. La autoridad explicó en una comparecencia ante los medios que los bomberos ya controlaron el fuego y que falta recuperar aún seis cadáveres.
El Winter Cherry, inaugurado en 2013, es uno de los centros más populares de la ciudad de Kemerovo y este domingo estaba lleno de personas, al ser el primer fin de semana tras el receso escolar. Según reportes de prensa, el fuego se declaró cerca de un área de juegos y de un cine, en el último piso del edificio. Las autoridades temen que la cifra de víctimas fatales pueda seguir creciendo.
El vicegobernador del distrito de Kemerovo, Vladimir Chernov, dijo a la agencia de noticias Tass que, de acuerdo con las investigaciones preliminares, se han detectado «numerosas violaciones» de las normas de protección contra incendios. En tanto, bomberos relataron que dos de las tres salas de cine del lugar se derrumbaron, mientras que se informaba también de la detención de cuatro personas, entre ellas el director del centro comercial.
Deficiente seguridad
Testigos citados por medios rusos aseguraron que al principio los visitantes del cine no pudieron salir de las salas y cuando se abrieron las puertas, los pasillos ya estaban llenos de humo. Según los testigos, tampoco se había activado la alarma contra incendios y las salidas de emergencia estaban cerradas. «Nadie sabe exactamente cuánta gente había en el centro comercial cuando se declaró el incendio”, reveló Alexandre Eremeyev, funcionario gubernamental.
Este lunes los bomberos intentaban limpiar los escombros, mientras en los hospitales de la ciudad, que tienen 500 mil habitantes y se encuentra a unos 3.000 kilómetros de la capital rusa, siguen internadas 12 personas. La tragedia de Kemerovo es la mayor de este tipo registrada en Rusia desde 2009, cuando un incendio en un club nocturno mató a 156 personas en la ciudad de Perm.
Tomado de DW
