Sabina vino a negarlo todo, pero reconoció al santo Romero

Fotos: Mario Tobar

Por: Roxana Córdova

Una vez más los fans del maestro español Joaquín Sabina acudieron puntuales al llamado para escuchar los últimos éxitos del “Flaco”. Vino a negarlo todo, pero en los primeros minutos de iniciado el concierto reconoció que las tierras cuscatlecas son la cuna de figuras como el Santo Romero, del Mágico González y del poeta Roque Dalton.

La velada comenzaba y en el anfiteatro del Cifco las diferentes generaciones vibraban de igual manera con los éxitos del maestro. Del nuevo álbum Lo Niego Todo, solo sonaron cinco canciones: Lo niego todo, Quién más quién menos, No tan deprisa, Lágrimas de Mármol y Sin pena ni gloria. Luego la noche recogió los viejos éxitos que nunca pasan de moda.

Y sin embargo, noches de boda, contigo, princesa, donde habita el olvido un otras tanto más.

Sabina se tomó el tiempo para presentar a sus músicos con quienes dijo comparte todo, menos relaciones íntimas porque ellos no han querido. Lo que arrancó los aplausos y risas del público.

 

 

 

Ayer Sabina de nuevo le cantó al amor, a las putas, a la infidelidad, a los excesos de la vida. Esos excesos de los que muchos que estaban ayer coreando han conocido.

El poeta español se despidió ayer de El Salvador, le dedicó la canción Peces de Ciudad a los hermanos hondureños que también estaban en tierras cuscatlecas y se despidió diciendo que Ojala volvamos a vernos.