Agencias
Una vez más Nueva York se prepara para convertirse en escenario de moda desde el próximo 11 de Septiembre, cuando sus pasarelas darán la bienvenida a modistos de renombre internacional, como Carolina Herrera. Y a unos cuantos minutos de Manhattan, donde se realizarán varios de los desfiles del famoso“New York Fashion Week”, también se respirará moda, pero en una apuesta anti-estereotipos, que pretende mezclar lo popular con la elegancia, la distinción y la irreverencia.
Ese es el concepto que quiere mostrar en el vecindario de Corona, en Queens, el diseñador mexicano Osvaldo Rodríguez, un inmigrante que a los 16 años se fue a Estados Unidos en busca del sueño americano dejando atrás su natal Putla de Guerrero, en el estado de Oaxaca.
Aprovechando que la Gran Manzana será escenario de uno de los eventos de moda más importantes del mundo, el mexicano quiere mostrar que en lo popular también tienen cabida el glamur y la elegancia y de paso le declara una guerra a las imágenes impuestas por la sociedad sobre la belleza y “lo perfecto”, y hace un llamado a la diversidad y la inclusión.
“Yo no soy ni famoso ni conocido. Hasta ahora me estoy dando a conocer, pero quiero aprovechar esta fecha importante en el mundo de la moda para que la gente vea mis propuestas y mostrar que todas las personas, sin importar su estatura, sus cuerpos, su género, su raza o su orientación sexual, somos iguales y tenemos derecho a lucir bellos”, comentó el modisto, de 45 años, en entrevista con El Diario de Nueva York.
El inmigrante explicó que su colección “TODOS somos transparencias”, que presentará el próximo lunes 10 de septiembre en “El Trío Lounge”, de Corona, un vecindario donde se encuentran ventas callejeras de tacos, quesadillas y tamales, y considerada una zona neoyorquina de amplia presencia latina, es una manera de mostrar que la moda es de todos.
“Estamos en una época donde mucha gente todavía no es feliz porque se cohíbe de ser ellos mismos. Mis diseños son para todos, y sirven para decirle a la gente que, aunque seamos diferentes, en el fondo somos iguales y aquí en Nueva York la moda no tiene sexo. Tú te puedes vestir como quieras”, dijo el modisto, quien ha trabajado además en construcción y como cocinero, y admira las casa de moda de Oscar de la Renta y Carolina Herrera.
