La Nación
«Vamos a poder comenzar el duelo de nuestro hijo y hermano», Así comienza un comunicado de la familia del futbolista argentino Emiliano Sala, cuyo cadáver fue hallado entre los restos del avión que se estrelló en el Canal de la Mancha el 21 de enero último.
«Queríamos agradecerles todas sus muestras de afecto y de apoyo, en lo que es el momento más doloroso de nuestra vida. Ver que el mundo entero se moviliza para acompañarnos en nuestra búsqueda fue de una ayuda infinitamente valiosa, y es también gracias a ustedes que hoy vamos a poder empezar el duelo de nuestro hijo y hermano», escribió la familia.
«En este viernes por la mañana, nuestros pensamientos van hacia (el piloto) David Ibbotson y su familia, esperando que las autoridades hagan todo lo posible para encontrarlo. Les pedimos que respeten nuestro duelo en estos momentos difíciles y tengan a Emi en sus oraciones y pensamientos», agregan los allegados del ex goleador del Nantes.
Los restos del monomotor Piper Malibu pilotado por David, de 59 años, y que llevaba al ex delantero argentino del Nantes, de 28, hacia su nuevo club de Cardiff, en Gales, fueron localizados el domingo pasado en el lugar donde el avión había cesado de emitir, a 67,7 metros de profundidad a unos 20 kilómetros de la isla británica de Guernsey.
El cadáver hallado dentro del fuselaje fue llevado a tierra el jueves, pero los intentos para remolcar los restos del avión «fracasaron», según reconoció la Oficina de Investigación Británica de Accidentes Aéreos (AAIB).
Las causas del accidente todavía se desconocen pero la AAIB espera haber recuperado elementos suficientes para poder esclarecer la tragedia.
El duelo en Progreso
En tanto, los casi 3 mil habitantes de la localidad de Progreso, donde reside la familia Sala,vive desde ayer el luto de esta tragedia, que comenzó la noche del lunes 21 de enero cuando los medios informaban sobre la pérdida de contacto con el avión que trasladaba a Emiliano (28 años) desde Nantes a Gales, donde horas después debía comenzar sus entrenamientos en el Cardiff, que lo había adquirido en una transferencia millonaria en euros.
Horacio Sala, padre del jugador, decidió anoche no hablar más con la prensa. Está recluido en la pequeña casa que alquila -reside actualmente en Rosario-, donde hoy, desde muy temprano, arriban vecinos y familiares a expresar sus condolencias.
