7 lecciones para alcanzar la Felicidad por AFP Crecer

Redacción

Cada vez más académicos están explorando el campo de la felicidad desde un punto de vista  científico y a través de investigaciones rigurosas.

Hablar de la felicidad no es nada sencillo y sobre su definición todos tenemos un concepto muy particular.

De esta forma, se ha podido establecer como de los principales hallazgos que la felicidad como tal, es una variable multidimensional y multifacética que incluye los siguientes elementos:

  • Bienestar espiritual.
  • Bienestar físico.
  • Bienestar intelectual.
  • Bienestar relacional.
  • Bienestar emocional.

Basado en la investigación del profesor y escritor estadounidense-israelí, Tal Ben Shahar, quien es además psicólogo y filósofo con un doctorado en comportamiento social, AFP Crecer ha decidido compartir estas sabias lecciones para alcanzar la felicidad.

  1. Darse permiso para ser humano: ¡Aceptar las emociones! Es importante ver al miedo, la tristeza o la ansiedad como algo natural, de esa forma la probabilidad de superarlas es mayor. En cambio, rechazar las emociones, positivas o negativas, conduce a la frustración y la infelicidad.

Se tiene una cultura obsesionada con el placer, creyendo que la marca de una vida digna es la ausencia de incomodidad, y cuando se experimenta dolor, se toma para indicar que algo debe estar mal, sin embargo, lo malo es no experimentar tristeza o ansiedad porque esas son las emociones humanas.

Lección 2: La felicidad se encuentra en la intersección entre placer y significado. Ya sea en el trabajo o en el hogar, el objetivo es participar en actividades que sean personalmente significativas y agradables. Cuando esto no sea posible, es necesario asegurarse de tener impulsores de la felicidad, que son momentos durante la semana que brindan placer y significado.

Según investigaciones, una hora o dos de una experiencia significativa y placentera puede afectar la calidad de un día entero, o incluso una semana entera.

Lección 3: Es necesario tener en cuenta que la felicidad depende principalmente del estado de ánimo de una persona, y no del estado de una cuenta bancaria. Salvo circunstancias extremas, el nivel de bienestar está determinado por lo que se elige enfocar y por la interpretación de los eventos externos. Por ejemplo ¿Se considera un fracaso como catastrófico, o se ve como una oportunidad de aprendizaje?

Lección 4: ¡Simplifica! En general, las personas están demasiado ocupadas, tratando de exprimir cada vez más actividades en menos tiempo. En ese sentido, la cantidad influye en la calidad y de esta forma se compromete la felicidad al tratar de hacer demasiado. Saber cuándo decir ‘no’ a los demás a menudo significa decir ‘sí’ a uno mismo.

Lección 5: Es necesario recordar la conexión mente-cuerpo. Lo que se hace o no se hace con el cuerpo, influye en la mente. El ejercicio regular, el sueño adecuado y los hábitos alimenticios saludables conducen a la salud física y mental.

Lección 6: ¡Gracias! Expresar gratitud, siempre que sea posible es fundamental. Con demasiada frecuencia la vida se da por sentado, por eso, aprender a valorar y saborear las cosas maravillosas de la vida es clave, desde las personas hasta la comida, desde la naturaleza hasta una sonrisa.

Lección 7: Hay que priorizar las relaciones. El predictor número uno de la felicidad es el tiempo que se pasa con las personas que importan y que se preocupan por nosotros. La fuente más importante de felicidad puede ser la persona sentada a su lado. Por eso, hay que apreciarlas y saborear el tiempo que pasan juntos.

La felicidad consiste en encontrar un sentido de propósito (bienestar espiritual) llevando un estilo de vida saludable (bienestar físico), promoviendo el aprendizaje y curiosidad (bienestar intelectual), encontrando amistad (bienestar relacional), aprendiendo a lidiar con emociones dolorosas y experimentando placer (bienestar emocional).

AFP CRECER te recuerda que ser feliz, no es tener una vida perfecta; ser feliz es reconocer que la vida vale la pena a pesar de todas las dificultades.

¡Prepara tu futuro! Y recuerda: no ahorres lo que te queda después de gastar, gasta lo que te queda después de ahorrar.