Kobe Bryant y su esposa tenían un pacto para no volar juntos en helicóptero

Por Vanity Fair

Cuando el pasado domingo se conoció la trágica muerte en accidente de helicóptero del ex jugador de la NBA Kobe Bryant , su hija de 13 años Gianna y siete personas más, pudo sorprender que recurrieran a ese medio de transporte para un desplazamiento dentro de Los Ángeles. Iban de camino a un partido de la liga juvenil de baloncesto en la que jugaba la niña. Las especiales características de la ciudad, en la que diariamente se producen atascos de horas que condicionan dramáticamente la agenda y compromisos de sus habitantes, convierten esa práctica en algo común.

A pesar de que los vuelos en helicóptero formaban parte de la rutina de la familia, Bryant y su esposa, la ex modelo y bailarina Vanessa Laine Bryant, habían llegado a un acuerdo, conscientes de los riesgos que entrañaban estos trayectos. «Vanessa y él tenían el pacto de nunca volar juntos en el mismo helicóptero», ha revelado una fuente próxima a los Bryant a People. Casados en 2001, fruto de la relación de Kobe (41 años) y Vanessa (37) tuvieron cuatro hijas: Natalia (17), la fallecida Gianna, Bianka (3) y Capri, que nació en junio de 2019. Entre las condiciones que se tenían que dar para que el deportista se subiera a un helicóptero también estaba que lo pilotase Ara Zobayan, a los mandos de la aeronave en el momento del siniestro.

Cuanto estaba en activo Bryant comenzó a recurrir habitualmente al helicóptero. Incluso iba a los entrenamientos de Los Angeles Lakers con este medio de transporte. Algo que llamó la atención de los periodistas españoles y por lo que preguntaban a menudo a su compañero Pau Gasol. La explicación no era tanto una extravagancia de estrella de la NBA como una solución que había encontrado para mejorar su vida familiar. «Por culpa de un atasco podía perderme cosas como una función escolar. Se me ocurrió que era una buena manera de seguir entrenando y centrarme en mi trabajo sin quitar tiempo a mi familiar. Ahí fue cuando pensé en los helicópteros, que me permitían estar en todas partes en 15 minutos».

«Una de las cosas que más le ilusionaron de retirarse de la NBA era pasar más tiempo con su familia», ha informado un amigo de los Bryant. «Era un padre muy presente, que tenía muchas esperanzas depositadas en todas sus hijas. Le llenaba de orgullo no sólo cuidarlas junto a Vanesssa, sino verlas crecer por sí mismas. Tenía un vínculo muy especial con las cuatro».