Quique Arathoon navengando cada día a Tokio

Por Comité Olímpico Salvadoreños

El primer atleta salvadoreño clasificado a los Juegos Olímpicos Tokio 2020, Enrique Arathoon, de la Federación Salvadoreña de Vela Fesavela, recientemente compitió en el Campeonato Nacional de Holanda, donde se ubicó en la sexta posición de 29 veleristas.

“Estamos entrenando y mañana seguimos con el equipo de Israel, de Holanda y con el seleccionado chileno en Medemblik, Holanda”, señaló el velerista al programa Team ESA Sports Radio & TV.

Referente a la competencia de Kiel Woche 2020, en Alemania, externó: “entré bien a las finales y esta vez fue un campeonato especial, nos dejaron entrar a la marina en el día de competencia, se hicieron 3 regatas, una más de las que estamos habituados. El primer día fui uno de los más fuertes, pero en las finales no estuve muy atinado, pero quedamos entre los mejores 40”.

Le ha tomado el cambio de clima de Europa y se preparó con ropa de invierno: “en Italia he comprado un neopreno grueso, me gusta navegar con frío, y el agua fría lo refresca a uno, y sirve para que el cuerpo no se recaliente y cuando hay calor el cuerpo se sofoca”.

Y así como nuestro hashtag nunca paramos, Arathoon del Team ESA igual. El fin de semana competirá en el United 4 Medemblik, en Holanda.
Además nos contó que lo que le ayuda a tener su estado anímico es estar motivado y tranquilo “no debe ser ni muy alto, por que nos cansamos, llegamos al campeonato agotados y ni muy bajo, por que nos hace falta energía, yo estoy claro que cuando salgo al agua, es que tengo una oportunidad de mejorar y aprender y la actitud cambia y la manera de cómo afronto el campeonato”, sostuvo el velerista.

Con respecto al clima expresó: “vemos el parte meteorológico, pero a la hora de la regata vamos viendo, y lo vamos leyendo en el momento de la regata y vamos probando, por la izquierda, derecha, vemos quien va por el centro, y luego jugar con la decisión de la salida, pero el viento puede cambiar”.

Otro aspecto en la vela es tomar riesgos, en ese sentido, indicó que “eso es lo lindo del deporte, debemos leer el viento, la diferencia de presión, se va midiendo, no se trata de tirar la moneda cara o cruz, hay que ir buscando el lugar y el momento para un ataque de riesgo”.

Los veleristas comen con dos horas de anticipación, en el caso de Quique él prepara su comida y su entremés. Por ejemplo, pan con mermelada, miel o queso crema, guineos y nueces y su proteína que se la prepara su entrenador, el español Javier Cebrián.

Quique nos contó de la amistad de los velerista con los europeos, coreanos y los latinos “He tenido la oportunidad de tener amistades, por ejemplo de Italia a Alemania, maneje y compartí con el gringo, nos repartimos gastos y así ya once años en el circuito me conozco a todos , somos rivales pero al entrenar juntos sabemos que vamos a mejorar, la gente no se guarda el entrenar solo, ya que el que mejor navegue es el que va a ganar”, comentó.

Otra cita deportiva pendiente de Quique es el Campeonato Láser Europeo en Gdansk, en Polonia, a desarrollarse del 6 al 13 de octubre de 2020. El primero de noviembre iniciará la pretemporada es un campeonato con viento fuerte y entrenará con el equipo de España, de Montenegro y luego terminar en diciembre con una regata en Gran Canaria y a finales de año quiere regresar para ver a su familia y novia.