Por Peter STEBINGS
España ganó la Copa Mundial Femenina por primera vez en su historia con la capitana Olga Carmona marcando en la primera mitad para una merecida victoria por 1-0 sobre Inglaterra en la final del domingo.
El apasionante encuentro fue una conclusión adecuada para un torneo en Australia y Nueva Zelanda que ha batido récords y será recordado por cómo los supuestos pececillos cerraron la brecha en los lados en la parte superior.
Frente a una multitud de casi 76.000 espectadores en el Estadio Australia de Sídney, España fue el equipo más consumado y tuvo más oportunidades, incluida la falla de un penalti en la segunda mitad.
El triunfo de España fue una reivindicación para Jorge Vilda y la Federación Española de Fútbol, quienes se mantuvieron con el entrenador incluso después de que 15 jugadores el año pasado dijeron que ya no querían representar a su país con él.
La defensora Carmona anotó lo que resultó ser el gol de la victoria, arrasando desde el lateral izquierdo para golpear el balón por debajo y con fuerza en el minuto 29, superando a la guardameta inglesa Mary Earps.
«Es difícil de describir, una alegría inmensa, estoy muy orgullosa de este equipo», dijo Vilda, de 42 años, acusada de ser demasiado estricta, entre una letanía de quejas.
Hubo un puñado de abucheos cuando su imagen se colocó en el Estadio Australia durante el partido y nuevamente cuando subió al podio antes de que España levantara el trofeo.
«Estoy muy feliz por todos los que nos miran en este momento, los hemos hecho felices también. Somos campeones del mundo», agregó Vilda, quien recordó a tres de los 15 amotinados del torneo pero dejó a varios de los mejores jugadores en casa. .
La seleccionadora de Inglaterra, Sarina Wiegman, ahora ha sufrido derrotas consecutivas en la final, y sus campeonas europeas pueden tener pocas quejas.
Ante la atenta Reina Letizia, España ganó un penalti a 20 minutos del final cuando se dictaminó que Keira Walsh había tocado en el área tras una larga revisión del VAR.
Pero el débil penalti de Jennifer Hermoso fue detenido fácilmente por Earps para darle a Inglaterra un salvavidas y mantener vivos sus sueños de ganar la Copa del Mundo por primera vez.
Pero en todo caso, España parecía tener más probabilidades de marcar de nuevo.
Los jugadores españoles saltaron desde el banquillo con el pitido final, mientras que los jugadores ingleses quedaron desconsolados, algunos con la cabeza entre las manos y otros llorando.
España es el quinto equipo en levantar la Copa del Mundo desde que comenzó el torneo en 1991, uniéndose a los campeones salientes Estados Unidos, Alemania, Noruega y Japón.
– Otra vez el dolor final de Wiegman –
Wiegman, que sufrió una agonía en la final hace cuatro años cuando su selección holandesa perdió 2-0 ante Estados Unidos, tenía como objetivo unirse a Alf Ramsey, el único otro entrenador que ganó una Copa del Mundo para Inglaterra.
Admitió que España, que nunca había ganado un partido eliminatorio de la Copa del Mundo hasta este torneo, era el mejor equipo.
«Por supuesto que se siente muy mal ahora. Vas a la final, quieres darlo todo para ganar la final, luego la pierdes», dijo el técnico holandés, que llevó a Inglaterra a su primer título importante el verano pasado al ganar su casa. Euros.
«Lo que hemos hecho, cómo nos hemos mostrado como equipo, cómo queremos jugar, superando tantos desafíos, siento que podemos estar muy orgullosos de nosotros mismos, aunque en este momento no se sienta así». ella añadió.
Aitana Bonmati, una de las primerizas que regresaron para la Copa del Mundo, ganó el Balón de Oro a la mejor jugadora del torneo, mientras que la japonesa Hinata Miyazawa se llevó la Bota de Oro como máxima goleadora con cinco goles.
Earps, quien estuvo ocupado durante gran parte de la noche por una hábil España, ganó el Guante de Oro como mejor portero.
La atacante española de 19 años Salma Paralluelo, quien reemplazó a la actual dos veces ganadora del Balón de Oro Alexia Putellas en la alineación titular de España, fue nombrada mejor jugadora joven.
– Los pececillos hacen marca –
El fútbol femenino aún enfrenta una batalla por la igualdad con el juego masculino y varios equipos en la Copa del Mundo estaban en disputa abierta con sus federaciones sobre salarios y condiciones.
Fuera de la cancha, la Copa Mundial Femenina más grande de la historia, con 32 equipos, fue la más concurrida de la historia y la mayoría de los partidos se jugaron frente a multitudes extraordinarias.
En él, un torneo lleno de sorpresas marcó el final del largo reinado de Estados Unidos como la superpotencia del fútbol femenino, ya que sus sueños de un tercer título consecutivo sin precedentes llegaron a su fin en octavos de final, su salida más temprana.
Suecia, que eliminó a los estadounidenses en los penaltis, finalizó tercero tras vencer a Australia 2-0 el sábado.
Las Matildas tuvieron el consuelo de capturar los corazones de la nación de origen, sus hazañas al llegar a las semifinales por primera vez aparecieron en las portadas y contraportadas de los periódicos locales casi a diario.
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