Dos potentes terremotos golpearon el sur de Cuba este domingo, en una secuencia rápida de eventos sísmicos que generó preocupación, aunque hasta el momento no se han reportado víctimas fatales, según las autoridades locales. El Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS) confirmó que el segundo temblor alcanzó una magnitud de 6,8, con epicentro en el mar, cerca de la costa de la provincia de Granma.
El sismo más fuerte ocurrió a 23,5 kilómetros de profundidad, a unos 40 kilómetros de la localidad de Bartolomé Masó, y se produjo tan solo una hora después de un primer terremoto de magnitud 5,9, también en el océano, cerca de la costa sur de la isla y a unos 175 kilómetros de Santiago de Cuba, la segunda ciudad más grande del país.
Pese a la intensidad de los movimientos sísmicos, el Servicio Nacional de Tsunamis de Estados Unidos indicó que no se emitió ninguna alerta de tsunami, y las autoridades cubanas confirmaron que, de manera preliminar, no se han registrado muertes o daños materiales importantes.
Este evento sísmico ocurre en un momento crítico para Cuba, que aún se recupera de los daños causados por el huracán Rafael, que recientemente impactó el oeste del país, dejando a miles de personas sin electricidad durante varios días.
En octubre pasado, un terremoto de menor magnitud (5,1) también afectó la región de Santiago de Cuba, pero no provocó grandes daños ni víctimas.