Los vendedores que diariamente abordan las unidades de transporte para comercializar con frutas y verduras en la zona de la Avenida Independencia y Alameda Juan Pablo II protestaron en la mañana de este jueves porque ya no se les convocó a la mesa de diálogo donde se discute el tema del SITRAMSS.
Pedro Julio Hernández, de la Coordinadora Nacional de Vendedores (CNV), sostuvo que al entrar en funcionamiento el nuevo sistema de transporte unas 450 familias que se sostienen del comercio informal se quedarán sin su fuente de empleo.
El gobierno inicio esta semana con las pruebas pilotos del SITRAMSS, en horas de la noche.
«Estos vendedores son los que se suben a los buses pero al entrar el SITRAMSS esas unidades ya no llegaran al centro de San Salvador y a nosotros no se nos dio alternativas, queremos que el señor Óscar Ortiz (vicepresidente de la República) nos reciba para hablar de este punto», expresó Hernández, quien aseguró que desde hace cuatro meses no han sido invitados a las reuniones.
Una de las propuestas de este sector es la construcción de «pasarelas comerciales» o la construcción de chalets en la terminal del SITRAMSS y en los diferentes puntos de abordaje.
Los vendedores esperan que el vicepresidente sea accesible y monte una mesa de diálogo.
