Ciclistas y peatones coparon las principales avenidas de la ciudad francesa por iniciativa de la alcaldía para frenar la polución. Se realizó a dos meses de la conferencia climática COP21.
Caminar por el medio de la famosa avenida Champs-Elysées es una proeza que este domingo pudieron experimentar miles de personas en la jornada París sin autos, organizada por iniciativa de la alcaldesa de la ciudad, Anne Hidalgo. La propuesta consistía -tal como lo indica su nombre- en dejar por un día el coche y disfrutar de los mayores atractivos parisinos a pie o en bicicleta.
Con un cielo totalmente despejado y una temperatura agradable, más digna de la primavera que del recién inaugurado otoño boreal, la idea prendió y tanto turistas extranjeros como franceses se volcaron a las calles. Desde el Arco del Triunfo hasta el Museo del Louvre, incluso los alrededores de la Torre Eiffel o la transitada zona del boulevard Saint-Germain-des-Près, el tránsito estuvo restringido.
La postal, sin embargo, no prometía la falta absoluta de coches, sino que en la totalidad de la ciudad se estableció una circulación con una velocidad máxima de 20 kilómetros por hora. En las zonas más concurridas, la prohibición de usar autos fue completa y hasta hubo corredores estrictamente reservados a los peatones.
«Nunca pensé que iba a poder sentarme en plena avenida», festeja Marie, una estudiante francesa que se instaló con su novio en una reposera en Champs-Elysées con vista al obelisco de la plaza de la Concordia. No es la única que llevó su propia silla. Son muchos los que decidieron aprovechar la vía, la más emblemática de París, para acomodarse y celebrar que el único ruido ambiental fuera el murmullo del resto de los paseantes.
«No sabíamos que esto se hacía hoy. Es una manera distinta de experimentar París, sin dudas», afirma a orillas del Sena Johanna, turista estadounidense de 25 años que llegó a Francia hace tan solo dos días. Mientras continúa su camino, irrumpen en escena un centenar de skaters, quienes también encontraron la oportunidad para recorrer las calles a su gusto.
Una iniciativa ecológica
La alcaldesa parisina anunció en marzo pasado que el 27 de septiembre se realizaría por primera vez París sans voiture, iniciativa similar a las de otros países del mundo para concientizar sobre la contaminación que genera el uso excesivo de automóviles e incentivar medios alternativos de transporte, como la bicicleta.
«París puede funcionar sin autos», había dicho Hidalgo a principios de mes al diario Le Parisien. En principio, su objetivo era que la ciudad bloqueara el tránsito por completo, pero finalmente los controles se concentraron sobre los ocho barrios donde se encuentran los principales centros turísticos. «Espero que el próximo año podamos establecer un perímetro más amplio», sostuvo hoy.
PARÍS ES UNA DE LAS CIUDADES CON MAYOR POLUCIÓN DE EUROPA
París es una de las ciudades con mayor polución de Europa, con una medición de 147 microgramos de partículas en suspensión. La contaminación llegó a niveles tan altos de insalubridad que en el último tiempo fueron aplicadas medidas como la restricción de coches según el número de la matrícula y la eliminación temporal de las tarifas del transporte público para reducir el tráfico.
La capital francesa, además, será dentro de dos meses -del 30 de noviembre al 11 de diciembre- la sede de la COP21, la conferencia de las Naciones Unidas de la que participarán los líderes mundiales para atender la crisis del cambio climático y el calentamiento global.
