“El maltrato físico no es una manera de corregir, lo es el abrazo”

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Por: Liset Orellana

El Instituto Salvadoreño para el Desarrollo Integral de la Niñez y Adolescencia (ISNA) se ha unido a la campaña “La protección comienza en el hogar” que diferentes instituciones desarrollan para contrarrestar el maltrato físico y psicológico hacia la niñez y adolescencia.

La Directora Ejecutiva del ISNA, Elba de Ortiz, destacó la importancia de este tipo de iniciativas para cambiar la cultura de algunas familias y transformarlas en una “disciplina positiva”.

Dentro de un plan estratégico global, la meta de las autoridades del ISNA es reducir el número de niños y adolescentes que reciben en la institución. Generalmente los menores recibidos provienen de una situación familiar o escolar difícil y en algunos casos con muchos traumas.

“Esta campaña de prevención es una campaña que nosotros la llamamos de cuerpo a cuerpo porque se habla y se le pregunta a los padres de familia si quieren participar y es impresionante el trabajo que hacen nuestros voluntarios. Nuestro método de acercamiento a la familia ha sido bien recibido”, expresó la directora.

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Añadió que se promueve en la Asamblea Legislativa una reforma sobre el maltrato físico hacia la niñez y adolescencia. “Estamos en contra del castigo físico porque es una huella que queda en el niño y la niña; el maltrato físico no es una manera de corregir, la manera correcta es el abrazo”, indicó.

El ISNA apoya esta campaña dentro del programa “También soy persona” que se ejecuta en 16 municipios del país, beneficiando a unas 9,600 familias.

El ISNA también ejecuta un programa que ayuda a las víctimas de agresión sexual y en condiciones altas de vulnerabilidad: Cambia tu vida.

Gracias a este proyecto unos 6 jóvenes que participan del programa viajarán a Estados Unidos a finales de septiembre de 2016 para aprender a elaborar piezas de avión. La beca fue gracias a una institución religiosa y durante dos años los jóvenes aprenderán este oficio.

Según de Ortiz, hasta junio de este año el ISNA recibió a 288 niños y adolescentes en condiciones de vulnerabilidad. El año pasado en la misma fecha se tenían unos 1,500 niños; esto significa para la directora de la institución que los planes de prevención impulsados en los últimos meses ha funcionado.

El objetivo de las autoridades, dijo, es que el ISNA atienda menos niños, niñas y adolescentes en el futuro.