SICA agradece a El Salvador la ayuda a Honduras y a Guatemala por la tormenta Eta

San Salvador, nov (EFE).- El secretario general del Sistema de la Integración Centroamericana (SICA), Vinicio Cerezo, agradeció al presidente de El Salvador, Nayib Bukele, por la ayuda prometida a Honduras y Guatemala para atender la emergencia generada por la tormenta tropical Eta.

«La solidaridad empieza entre los vecinos y hermanos centroamericanos. Agradezco a Nayib Bukele el apoyo de El Salvador a Guatemala y Honduras por poner a disposición 100 rescatistas y un millón de dólares en paquetes alimentarios para cada país», publicó Cerezo en la red social Twitter.

De acuerdo con información del SICA, el fenómeno dejó a su paso por Centroamérica a 3 millones de personas afectadas, principalmente en Nicaragua, Honduras y Guatemala.

El presidente salvadoreño anunció la noche del sábado en su cuenta de Facebook que su país enviaría 200 socorristas, maquinaria y 2 millones de dólares en paquetes alimenticios a Honduras y Guatemala.

El presidente guatemalteco, Alejandro Giammattei, señaló que «es bienvenida la ayuda con 100 rescatistas y alimentos que nos han ofrecido».
Se espera que el Ministro de Obras Públicas, Romeo Rodríguez, supervise la noche de este domingo la logística para la carga y envío de los alimentos.

ALERTA ROJA SE MANTIENE EN EL SALVADOR
Las autoridades salvadoreñas ha llevado a unas 2.294 personas a 56 albergues en diferentes partes del país, en el que las lluvias únicamente han dejado a una persona fallecida.

Pese a no presentar daños mayores, el país se mantendrá en alerta roja por el riesgo de deslaves que se mantiene.

«Estamos garantizando que todos los albergues tengan las condiciones adecuadas con los protocolos y las medidas de bioseguridad, para la prevención de la covid-19», aseguró la jefa del Gabinete de Gobierno, Carolina Recinos.

Eta tocó tierra el pasado martes en Nicaragua como un poderoso huracán y, tras arribar a Honduras como depresión tropical, finalmente el viernes salió de Centroamérica, aunque ha dejado cientos de desaparecidos, y al menos 27 muertos en Guatemala, 25 en Honduras y otro más en El Salvador.