La doctora que sale al rescate de los habitantes olvidados de San Juan Buena Vista | FOTORREPORTAJE

Fotos de Nathaly Moza

Por Nathaly Moza | Texto y Foto

“San Juan Buena Vista” es un caserío que posee un nombre optimista, a pesar que posee un gran riqueza de flores y animales, la realidad de sus habitantes es otra.

Ubicado en el Municipio de San José Villanueva, en La Libertad, este lugar solo cuenta con una escuela, y una unidad de salud que se abre cada 4 meses.

En este lugar, desde pequeños se les enseña a los niños a trabajar las “tierras”, para poder tener el sustento diario.

No solo las medicinas o inyecciones son parte del equipo de un doctor, especialmente, para la Dra Marta Portillo, quien deja su estetoscopio de lado para llevar alimentos a los habitantes olvidados de “San Juan Buena Vista”.

Desde hace 5 años, cada mes, la experta en salud aparta una mañana de su agenda para repartir está ayuda alimenticia junto a otros miembros de su familia. Los paquetes salen del Municipio de Zaragoza, hacia el el caserío, que está ubicado a 33.3 kilómetros del punto de partida.

El trayecto dura aproximadamente 53 minutos en carro. Para llegar al caserío se deben pasar por varias curvas, caminos boscosos y un río. Cada vez que llueve, este río crece, y deja a los habitantes incomunicados con el exterior, debido a que ningún bus se atreve a pasar por ese tramo.

En la época seca, el transporte público solo hace 3 viajes hacia San Juan Buenavista, debido a las malas condiciones de las calles, y el bajo comercio del lugar.

La Hacienda “San Juan Buena Vista”, nombrada en honor al caserío, solía ser un referente de la plantación del café en dicho lugar, sin embargo, con el paso de los años fue perdiendo su prosperidad.

Actualmente, siguen produciendo café, y otros productos agrícolas pero en menor cantidad, debido a la falta de accesibilidad al territorio y el desconocimiento de la población sobre el mismo, lo que ha afectado el comercio y ganancias de todos sus habitantes. Dicho lugar es dónde se reparten los paquetes alimenticios.

Antes de repartir los paquetes, los habitantes se reúnen para dar gracias por la ayuda que recibirán, cada uno de ellos se desplazan a primera hora del día, para esperar con ansias la ayuda que llegará. El acto de agradecimiento involucra una reflexión corta, la cual es guiada por la Dra Portillo.

Los paquetes, que cada representante de familia recibe, incluyen alimentos básicos como: arroz, frijoles, aceite, azúcar, sal y candelas, ya que la mayoría de los habitantes que residen en San Juan Buena Vista no tienen luz, ni tampoco agua potable. Alrededor de 30 familias son beneficiadas con está acción.

Las personas beneficiadas hacen filas mientras esperan a ser llamados y recibir su paquete. Los colaboradores y miembros de la familia de la Dra Portillo son los encargados de entregar los alimentos, para agilizar el proceso, y asegurarse de que las medidas de bioseguridad se respeten para evitar cualquier contagio por COVID-19.

Una vez han recibido su paquete, se pasa una lista para asegurarse que nadie se ha quedado sin sus alimentos. En caso de que alguien haya faltado a la entrega, algunos toman doble paquete para entregárselo a la persona que no puedo llegar. Además, si han sobrado algunos productos, se reparten entre todos.

Al finalizar, todos los habitantes, incluyendo niños y adultos, se marchan hacía sus hogares. Para la mayoría, este paquete representa el sustento de varias semanas, ya que muchos por su edad, o por problemas de salud se les imposibilita salir a trabajar fuera de sus hogares, por lo que solo se dedican a sembrar un poco de granos básicos, y así poder subsistir.