La junta militar, en el poder en Naypyidaw, confirmó que luego del terremoto en Myanmar, la cifra de muertos sigue aumentando, hasta el momento se registran 3.085 muertos, 4.715 heridos y más de 300 desaparecidos.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha dicho tras una evaluación inicial que cuatro hospitales y un centro de salud han quedado completamente destruidos, mientras que otros 32 hospitales y 18 centros de salud habían sufrido daños parciales.
Al menos 1.550 rescatistas internacionales operaban hoy, jueves 3, junto a ciudadanos locales, según el Ejército al mando. Hasta 17 países han enviado suministros y equipos de rescate.
El terremoto ha agravado una crisis humanitaria ya de por sí grave, con más de tres millones de personas desplazadas de sus hogares y casi 20 ya necesitadas antes de la catástrofe, según la ONU.