Luis Miguel deja de comer, pero no de beber

Agencias

Luis Miguel ya le dijo adiós a la imagen degradada que lo seguía. El sobrepeso ya es cosa del pasado, y parte de las deudas millonarias que tenía ya lo dejan dormir en paz.

La semana pasada encontramos al cantante disfrutando tranquilamente de su soledad y en su residencia favorita: un yate de lujo. Esta no es la primera vez que lo vemos pasando la tarde en la bahía de Biscayne, en Miami, pero sí en la que mejor luce desde hace tres años cuando sorprendió al público con un visible aumento de peso. “Luismirrey” está de vuelta con un bronceado perfecto, en forma y acompañado de su gran copa favorita.

El pasado 17 de agosto, las cámaras de Suelta la sopa lo captaron listo para salir a conquistar las calles de Miami. El cantante se fue acompañado de dos chicas y Gerardo Islas. Lucía impecable.

El Sol vuelve a brillar, y lo está haciendo como si viviera aún en su época dorada. No se sabe a ciencia cierta si este exclusivo juguete es suyo, pero ha sido en el que lo hemos encontrado desde el 2014.

Su renta va desde 38 mil hasta 105 mil pesos por día; está equipado con cinco camarotes, un jacuzzi, dos jet skis y demás comodidades.

A él le alcanza para eso y más, pues hace unas semanas, el empresario Carlos Bremer aseguró que la cantidad que se le pagó por romper el silencio de su vida fue de más de cinco millones de dólares.