Sacerdote enfrentará juicio por agresión sexual

El Metropolitano Digital

El Juzgado de 1ª Instancia del municipio del Puerto de la Libertad determinó hoy enviar a la etapa de sentencia el proceso judicial contra el sacerdote José Adonay Chicas Campos, ex párroco de la iglesia Nuestra Señor del Pilar de Zaragoza, en La Libertad y mantener la detención provisional con la que hasta hoy se encuentra.

Para el Juzgado de primera instancia del Puerto de la Libertad el ofertorio de prueba presentado por la FGR fue suficiente para señalar la probable participación del imputado en los hechos que se le imputan, será un Tribunal de sentencia el que determine la situación jurídica del procesado. El expediente judicial será enviado en los próximos días a un Tribunal de sentencia de Santa Tecla para que desarrolle una futura Vista pública.

El imputado, quien permanece detenido desde la etapa inicial del proceso, es acusado por la Fiscalia General de la República de los delitos de agresión sexual en menor e incapaz continuada, remuneración por actos eróticos y corrupción de niños, niñas y adolescentes por medio del uso de tecnologías de la comunicación en perjuicio de una víctima.

La audiencia preliminar es el acto procesal con el cual se cierra la etapa de investigación y es durante la audiencia que tanto la Fiscalia como los defensores ofrecen al juez las pruebas de cargo como de descargo contra el acusado. Y fue precedida por la Jueza de 1ª Instancia del Puerto de la Libertad.

El caso mantiene la reserva total, por protección a la víctima menor de edad, y según la investigación fiscal el sacerdote le agredió sexualmente a la víctima, quien asistía a la iglesia y los hechos habrían ocurrido en el interior de la parroquia donde Chicas Campos, había permanecido los últimos 25 años.

La Fiscalía señala que el sacerdote presuntamente estuvo abusando de la víctima desde hace unos dos años y que a cambio le daba diversas cantidades de dinero que iba desde $10, $20 y hasta $50, pero posteriormente dejó de pagarle. Las autoridades iniciaron la investigación tras una denuncia que parientes del menor interpusieron, tanto en las instituciones como en la iglesia católica, en las averiguaciones se obtuvieron indicios sobre los delitos. Tras esto, la Fiscalía giró la orden de captura en junio de 2018.