Salvadoreños lamentan impunidad en asesinato de arzobispo Romero

Foto de organización San Óscar Arnulfo Romero

AFP

Sacerdotes y feligreses de El Salvador demandaron este jueves justicia por el asesinato del canonizado arzobispo Óscar Arnulfo Romero, ejecutado por un escuadrón de la muerte hace 42 años, en la antesala de una guerra civil.

La muerte violenta de Romero es «el máximo ejemplo de impunidad en este país porque su caso no ha sido investigado», aseguró el sacerdote Juan Vicente Chopín, al presidir la misa en la emblemática capilla Divina Providencia, donde el pastor fue acribillado.

Tras participar en la misa mujeres, hombres y jóvenes con palmas y fotos del extinto arzobispo iniciaron una peregrinación que finalizó en la céntrica catedral capitalina donde el cardenal Gregorio Rosa Chávez presidió el cierre de la conmemoración.

«Monseñor Romero significó la luz para El Salvador y es una injusticia que no se haya castigado a los culpables del crimen», declaró a la AFP Hubertina Arévalo, de 71 años.

Para el maestro Armando Márquez, de 72 años, el Estado salvadoreño «tiene una deuda histórica para establecer la verdad en el magnicidio de monseñor Romero».

Monseñor Romero fue abatido de un disparo en el corazón por un sicario el 24 de marzo de 1980, mientras oficiaba misa en la capilla del hospital de enfermos de cáncer La Divina Providencia, en el noroeste de San Salvador.

Tras la muerte del arzobispo y por la injusticia social prevaleciente estalló la guerra civil en El Salvador que se extendió por 12 años, con el saldo de más de 75.000 muertos. Finalizó en 1992 tras la firma de acuerdos de paz gobierno-guerrilla.

En 1993, una Comisión de la Verdad de las Naciones Unidas señaló como autor intelectual del crimen al mayor del ejército Roberto D’Aubuisson, ya fallecido, fundador de la entonces gobernante Alianza Republicana Nacionalista (ARENA, derecha).

A petición de la ONG Tutela Legal María Julia Hernández, un juez reabrió el caso en 2017, luego que se derogó una ley de amnistía que encubrió los crímenes de guerra.

«El avance en las diligencias (ventiladas en el tribunal) han sido pocas», explicó el abogado de Tutela Legal, Ovidio Mauricio González.

Tras un largo proceso en el Vaticano el papa Francisco canonizó a Romero el 14 de octubre de 2018, y lo destacó como un férreo defensor de los derechos humanos y un ejemplo de la iglesia cercana a los pobres.