Roberto Cañas: Los políticos tienen una visión minimalista

El Metropolitano Digital

Roberto Cañas López, firmante de los Acuerdos de Paz, fundador del FMLN, economista y académico, quiere sumarle un nuevo logro a su vida, o como él dice, servirle al país desde otra trinchera. Bajo la bandera de Cambio Democrático, éste hombre de izquierda, busca ganar la alcaldía de San Salvador con propuestas fundamentadas en Seguridad, Desarrollo y Democracia.

Para Roberto Cañas, el Centro Histórico de San Salvador puede reconvertirse en un espacio cultural con el apoyo de todos los sectores. No le teme debatir con sus contrincantes políticos y se autodenominó el heredero del exalcalde, Héctor Silva, en conocimientos municipales y en continuar su legado.

 

¿Cuál es su propuesta para San Salvador?

Levantar la autoestima de los habitantes de San Salvador, es decir, esta ciudad es gris, triste, que da miedo, sucia, desordenada, entonces yo quiero que los habitantes se sientan orgullosos de su capital. Hay que elevar la autoestima de los que estamos aquí, ya no más ciudad gris, ya no más ciudad insegura, ni caótica.

Acá hay caos, es anárquico, totalmente desordenado. Entonces yo desde que acepté esto dije que haría que la gente se sintiera orgullosa de su capital. Acabo de regresar de Bogotá (Colombia) que es una ciudad que tiene 8 millones de habitantes….

 

Bogotá es una de las ciudades más emblemáticas en administración…

Sí, hay unas cosas que uno dice: me da envidia de la buena, porque es impresionante.

 

¿Retomará algunas cosas de las que vio (en Bogotá)?

Sí, hay que guardar distancias, uno no puede repetir mecánicamente las experiencias pero sí hay buenas prácticas, lecciones aprendidas que son útiles.

 

¿Qué diferencia hay entre su propuesta y la del resto de candidatos como Nayib Bukele y Edwin Zamora, por ejemplo?

Yo considero  que todas las comparaciones son odiosas pero le puedo decir lo que yo quiero hacer en la capital al ganar. Está sustentada en tres pilares: Seguridad, Desarrollo y Democracia.

Yo estoy muy claro que quiero una ciudad segura, ordenada, inteligente, limpia y abierta. Una ciudad segura es donde pueda caminar sin temor, con acciones de pequeño, inmediato y largo plazo.

Hay que darle protagonismo a la gente, conformar comités de prevención de la violencia y delincuencia en los barrios y colonias. La propuesta es comités de vecinos de la prevención de violencia. La otra cosa que es competencia de la alcaldía es el alumbrado público, también puedo trabajar el tema de los alumbrados públicos, la cultura de paz como elemento central de la convivencia.

Pero también hay que crear una ciudad moderna. Acá cuando llueve dos horas seguidas se inunda el centro de San Salvador porque los drenajes están rebasados. Esta ciudad está atrapada en los ’90 en términos de planeamiento urbano.

Los políticos aquí no hablan ni de política pública, ni de ordenamiento territorial. ¡No saben! ¿Qué es lo que saben aquí de gobernar una ciudad? Es una visión minimalista: recoger la basura, alumbrado público, los mercados y los cementerios.

Gobernar una ciudad es hacerla inteligente: con wifi gratuito y público, que sea la comunidad organizada que se encargue de cuidar los instrumentos.

 

¿Háblenos del componente de limpieza?

Hay que crear una cultura de reciclaje. Ya estamos en el siglo 21, no se trata de poner los promontorios en las esquinas de la colonia y que pase el tren de aseo puntual, eso es minimalista.

Yo estoy hablando de campañas para clasificar la basura, de organizar a los que andan recogiendo las latas, el papel y hacer cooperativas de recicladores. Estoy hablando de crear una empresa municipal recicladora de la basura, o sea, es más que recoger la basura.

 

¿Cómo piensa generar desarrollo en la capital?

La alcaldía debe ser generador de desarrollo económico local, es decir, generar empleo para la gente siendo atractivo San Salvador para la inversión directa y extranjera, ¿cómo se hace eso?

Acá uno de los problemas para que inviertan los empresarios es la tramitología y eso no depende del gobierno Central. La OPAMSS es la que da los permisos para la construcción y eso es larguísimo y desanima al empresario.

Para ser una ciudad con inversión y más empleo hay que ordenarlo. Construyen edificios para oficinas pero solo hay cuatro parqueos, es caótico.

Otro factor es la democracia, las reuniones del Concejo deben ser abiertas.

 

¿Qué hará con las ventas informales, que ha sido uno de los retos de los alcaldes en funciones?

Es paso a paso. No se puede hacer nada de un solo, debe ser una estrategia parcial. Mi meta es convertir el Centro Histórico en un polo de cultura de las Artes como La Habana, Quito, San Juan Puerto Rico, México D.F.

No nos vayamos tan lejos, en Guatemala en la zona 1 hay una zona viva donde la gente pueda caminar sin temor, ¿cómo se puede? Pues cerrando los miércoles con seguridad y parqueos en el Centro de San Salvador, luego dos días, después tres y así.

La recuperación del Centro Histórico se debe hacer con todos los que viven y transitan por ahí, no es apaleando. Esta es una ciudad manejable y se puede hacer, como se ha hecho en otros países.

 

¿Cómo tomó usted la decisión de ser candidato?

Yo soy un luchador social, un servidor, me he sentido orgulloso de eso. Fui firmante de los Acuerdos de Paz y ahí le di un servicio al país pero quiero darle más servicio a la nación.

Quiero ser alcalde de esta ciudad porque creo que necesita un cambio profundo, que las propuestas que se hacen son minimalistas.

Entonces cuando un movimiento de ciudadanos me busca y me dicen que ellos creen que yo pudo ser buen alcalde, pues bueno, tengo la competencia, los conocimientos para dirigir esta ciudad.

Saqué mis cuentas y dije: Esto es viable y puedo ganar porque ya hay cansancio de la población de los partidos grandes tradicionales.

Usted ha visto que no he hecho comentarios de los otros candidatos porque mi objetivo es demostrar que mis propuestas puedan sacar adelante a la capital.

 

Usted ha sido fundador del FMLN y firmante de los Acuerdos de Paz y ¿es por esa polarización que usted no corrió por ninguno de los partidos grandes?

El que me ha ofrecido es Cambio Democrático. El FMLN nunca me ofreció nada y tampoco esperaría que me ofreciera ARENA que es de derecha y yo de izquierda.

Nosotros vamos a construir una candidatura gobernando con la gente y eso es democracia.

 

¿Con su candidatura a quién le podría restar votos?

A nadie, mi blanco electoral es toda la gente de San Salvador; transversalizado, es decir, gente que quiera a esta ciudad, para ellos es mi mensaje, yo no estoy segmentando la ciudad. Yo no le quito a nadie, sino que estoy sumando y multiplicando.

 

¿Ya se afilió a Cambio Democrático?

Sí porque es un requisito. Yo me siento muy cómodo con este partido porque es de izquierda también, eso no me queda a mí conflicto.

 

¿Está abierto a un debate?

Sí, por supuesto, además muy seguro, con mucho conocimiento de municipalismo. Yo me declaro heredero de Héctor Silva que fue el primer alcalde de izquierda en San Salvador y el primer transformador de esta ciudad.

 

Usted dice que no le gustan las comparaciones, pero a la gente le interesa saber cómo ve usted las candidaturas de Nayib Bukele y Edwin Zamora

Ojalá que Nayib pueda incentivar a la juventud. En San Salvador la juventud es bastante apática, escéptica. Es de ver cuánto contribuye y me parece que es bueno. El compromiso de él con la ciudad lo vamos a ver cuándo se vaya a inscribir porque hay que inscribirse en dos listas. La lista ganadora y otra lista de precedencia que dice quiénes integrarán el concejo sino ganan como alcalde.

Yo quiero ganar, pero si no gano, yo soy el primero en la lista de precedencia como concejal.