Oleaje dejó 150 damnificados y 843 personas evacuadas

Foto cortesía de Mario Amaya

Por: Oscar Delaney / Jorge Molina

Un total de 150 personas damnificadas, 843 evacuaciones, 514 albergados, 162 viviendas anegadas y 40 destruidas, fue el resultado del oleaje y la marea que se registró en las costas del país el pasado fin de semana.

Debido a las afectaciones, algunos centros escolares en Barra Salada (Ahuachapán), Metalíllo (Sonsonate) han suspendido clases, hasta nuevo aviso.

Protección Civil presentó este lunes el consolidado de las emergencias atendidas en las zonas costeras de La Libertad, Sonsonate, Ahuachapán.

La marejada tuvo su punto más crítico el sábado por la tarde, al registrarse olas de hasta 4 metros de altura, cuando lo normal es de 1.2 metros, dijo la ministra de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN), Lina Pohl.

Jorge Meléndez, director de Protección Civil, dijo que, hasta el momento, no se reportan víctimas mortales por el fenómeno, sin embargo, hay un desaparecido. Se trata de un adolescente de 14 años, que desapareció en el puerto de Acajutla, Sonsonate.

“Las afectaciones en medios de vida han sido en toda la franja costera, las ramadas que son negocios temporales han sido destruidas en una cantidad de 117”, expresó el director de Protección Civil.

Meléndez, manifestó que han iniciado coordinaciones con las alcaldías y las comisiones departamentales de Protección Civil en los lugares afectados. El funcionario agregó que se cuenta con un comité técnico que evalúa las zonas que requieren atención inmediata.

Manifestó que existen familias que se niegan a abandonar sus hogares y seguir las indicaciones de los cuerpos de socorro y seguridad.

Meléndez envió un mensaje de concientización a la población que reside en las zonas costeras a que acaten las indicaciones del personal de Protección Civil.

Por su parte, la ministra de Medio Ambiente, enfatizó que la intensidad del oleaje y el incremento de la marea, así como los fuertes vientos, se deben al cambio climático, que el año pasado, causó una sequía nacional que fue clasificada como una de las más secas de la última década.